El hinojo es una hierba de olor agradable, con flores amarillas y hojas plumosas. Las semillas secas de hinojo son muy nutritivas, contienen fibra, magnesio, calcio y hierro, y durante mucho tiempo han sido utilizados para ayudar la digestión. Una buena forma de consumirlas es masticando media cucharadita de semillas después de una comida, o cuando tu estómago se sienta distendido debido a la acumulación de gas. También puedes preparar un sencillo té agregando una cucharadita de semillas a una taza de agua caliente, dejarlas reposar durante cinco minutos, colarlas y beber.
El salmón es doblemente bueno cuando se trata de combatir la grasa abdominal, ya que contiene tanto ácidos grasos omega-3 como vitamina D. Los niveles sanguíneos insuficientes de vitamina D se han relacionado con la obesidad, incluida la obesidad abdominal. Por otro lado, los ácidos grasos omega-3 del salmón y otros pescados grasos también pueden ayudar a aplanar el abdomen, alterando la expresión de ciertos genes, haciendo que tu cuerpo queme grasa en lugar de almacenarla.
Si quieres perder un poco de grasa de la cintura, los huevos son una gran manera de empezar el día. Los huevos están llenos de proteínas, y comerlos en el desayuno proporciona sensación de saciedad. Un estudio publicado en Nutrition Research encontró que las personas que comen huevos para el desayuno son menos propensas a comer en exceso el resto del día.
Las grasas monoinsaturadas saludables presentes en el aceite de oliva podrían potencialmente activar los genes relacionados con la quema y el almacenamiento de grasa. Las grasas monoinsaturadas también ayudan a controlar los niveles de azúcar en la sangre, que desempeñan un papel clave en mantener a raya el hambre y reducir la acumulación de grasa en la cintura.
Si bien todos los vegetales verdes contienen múltiples nutrientes y son bajos en calorías, los espárragos cumplen una triple función gracias a sus efectos anti-hinchazón. Son una fuente de prebióticos, que apoyan el crecimiento de bacterias 'buenas' para ayudar a mantener un equilibrio saludable en el sistema digestivo, y contiene fibra soluble e insoluble, que promueve la salud digestiva en general.
Los granos enteros, incluyendo la quinua, las palomitas de maíz, la avena y el trigo, pueden ayudar a aplanar tu abdomen. Un estudio del American Journal of Clinical Nutrition muestra que las personas que comen cereales integrales pierden más grasa abdominal que aquellos que no lo hacen.
Aunque mucha gente piensa que los plátanos engordan, en realidad son un importante alimento para lograr un vientre plano. Los alimentos ricos en potasio ayudan a deshinchar el vientre al actuar como un diurético natural, mientras que la fibra soluble de las bananas también puede ayudar a aliviar o prevenir el estreñimiento.
El yogur es una buena fuente de calcio, un mineral que reduce la producción de la hormona cortisol, que estimula la acumulación de grasa abdominal. Y mientras que el yogur regular de por sí es bueno, el yogur griego aporta además un 20 por ciento de las necesidades diarias de calcio.
Los pepinos están repletos de agua y naturalmente son bajos en calorías, ayudándote simultáneamente a hidratarte y controlar tu peso. Incluso si te sientes hinchado, los pepinos pueden ayudar con eso también.
Beber suficiente agua es compatible con cualquier otra forma que estés aplicando para aplanar tu abdomen. Al momento de aplanar el vientre, no solo debes tener en cuenta lo que comes, sino también lo que bebes. El agua es esencial para mover la fibra a través del sistema gastrointestinal y prevenir el estreñimiento. Dado que el agua con gas puede causar hinchazón, elige agua mineral natural sin gas, y apórtale frescura y sabor con rodajas de limón, lima, pepino u hojas de menta fresca.
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